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Italia tiene uno de los records europeos de accidentes cotidianos de trabajos

Italia tiene uno de los records europeos de accidentes cotidianos de trabajos

El promedio italiano de incidentes mortales es quatro cada dìa. Ademàs hay que acuerdar todos los accidentes que no estan denunciado porque las victimas trabajaban en "negro" (sin derechos laborales) o no son ciudadanos italianos. Se muere en las fàbricas, también en aquellas donde no se realizan productos peligrosos: se muere para ir a trabajar, en un paìs que hizo el transporte particular la manera màs comùn para moverse; se muere después de unos anyos, por las substancias toxicas que se han respirado durante decadas. Se muere en las miles zonas de obras que se encuentran en todo el paìs, y que fueron abierto para satisfechar el imaginario politico de las clases de gobierno: en las zonas de obras de la linea alta velocidad ya murieron decenas de obreros en las varias etapas de la linea (Torino-Milano-Modena, Firenze-Roma-Napoli).

Los medios de comunicacion y los politiqueros siguen llamandolas "muertes blancas", retomando una expresiòn que acuerda la inexplicable muerte de un ninyo en su cuna, pero estos "accidentes" no son inexplicables; las responsabilidades son muy precisas: los empleadores prefieren no respectar las normas de seguridad y exponen los trabajadores a ritmos de trabajo insostenibles.

La seguridad en el trabajo es una variable que depende de los intereses de los empresarios, quien, en nombre de los provechos aumentan las horas de trabajo, imponiendo turnos cansantes, que hacen peligrosas tambien las actividades que no implicarìan grandes riesgos. Los trabajadores sufren continuamente los chantajes que la precaridad de vida hace aceptar, y para llevar a casa sueldos de miseria son obligados a aceptar todas condiciones laborales: en negro o con contrato flexible, o con contrato por tiempo indeterminado, pero sin garantìas para su seguridad.

Los obreros en las fàbricas y en las zonas de obra, todas las trabajadoras y todos los trabajadores tienen afortunadamente la fuerza para senyalar todas las violaciones y omisiones en la seguridad; Asi' pasò a los seis obreros de la fàbrica ThyssenKrupp, quienes murieron en un incendio en el establecimiento en que trabajaban, pese que habìan denunciado varias veces el malo funcionamento de los extintores en dotaciòn. O como hicieron con su sitio en internet los trabajadores del puerto de Génova, quienes senyalaron y ensenyaron con unos videos sus condiciones laborales, tras que uno de sus companyeros muriò cayendo de un contenedor en mes de febrero.

Por eso naciò el blog en internet nomortilavoro.noblogs.org, donde un grupo de companyeras y companyeros utilizan el medio informatico para denunciar la inseguridad en su lugar de trabajo y para ofrir un espacio a las noticias sobre los omicidios de trabajo que ocurren todos los dìas en este paìs.

En particular este blog fue hecho por unos companyeros de Antonio Salerno Piccinino, que muriò el dìa 17 de enero 2006, mientras estaba trabajando: Antonio era un recadero en moto y estaba haciendo una entrega extraordinaria, un "favor personal" a uno de sus dirigentes, un viaje improvisado probablemente para ensenyar su fiablidad. Antonio muriò porque iba demasiado rapido por los ritmos inarestables y las presiones emotivas constantes que nos impone el sistema de trabajo neoliberal: disponibles, sonrientes y rapidos, siempre.

El gobierno que ya salio' ha aprobado un decreto ley sobre la seguridad en el trabajo, un texto normativo que no cambia nada en respeto a las leyes precedentes, pero que es muy ùtil como escaparate electoral para las elecciones de los dìas 13 y 14 abril 2008.

Para que nunca màs se muera de trabajo

màs informaciones en Nomortilavoro.noblogs.org

Juicios de Génova

Con el fin del año 2007 empezó el ciclo de fallos para los juicios relativos a los hechos de la protesta contra el g8 en 2001, que se tuvo en la ciudad italiana de Génova. Dos juicios principales tienen como imputados los activistas, mientras otros dos ven las fuerzas del orden por las violencias hechas a los demostrantes en un colegio que tenía fonción de dormitorio y de centro de medios y en un cuartel donde fueron llevados los manifestantes detenidos. En el colegio Diaz los manifestantes fueron golpeados mientras dormían por la policáa, que envió a muchas personas al hospital en graves condiciones y nada menos que en coma. En el cuartel del barrio Bolzaneto los manifestantes sufrieron vejaciones (violencias físicas, psicologicas y tratamientos inhumanos), que fuera de Italia han sido reconocidos como casos de tortura. Segùn la ley italiana, un juicio puede tener tres grados, o sea se puede llegar hasta una tercera repetición para tener la condena o la absolución definitiva. Los juicios de Génova, incluso los que acabaron en los ultimos meses, son todos todavía al primer grado y, por causa de una ley aprobada hace algunos años, los juicios para las violencias contra los manifestantes, porque tienen pena máxima menor que los otros, riesgan de caducar, o sea es casi seguro que las condenas seran “borradas”, porque la duración del juicio ya superó la pena maxima prevista por el crimen imputado. Como se acordó en la campaña fomentada por el colectivo Nodo Solidale y por varios compañeros mexicanos, el juicio contra los 25 manifestantes acusados de devastación y saqueo se acabó en su primer grado en diciembre de 2007, con penas muy pesadas, que van hasta los dieciseis años de carcel por unos escaparates rotos. Como por ley, las razones del fallo fue publicado después de aproximatamente 90, en marzo 2008: de hecho los jueces reconocieron que las cargas violentas y no autorizadas de los carabineros contra la gran marcha que pasaba por Génova provocaron el “desconchado” de la marcha misma e hicieron empezar los disturbios que llevaron hasta la plaza Alimonda, donde fue asesinado el compañero Carlo Giuliani, pero al mismo tiempo condenaron los companñero por haber seguido en los enfrentamentos después de la carga de los carabineros. Para los jueces eso fue una prueba para enseñar que manifestantes facisnerosos y violentos habian premeditado los enfrentamientos y que estos manifestantes tienen que ser punidos. En el mes de Marzo hubo también el fallo por la violencias en el cuartel de Bolzaneto, donde los manifestantes detenidos sufrieron varias violencias reconocidas como tortura en los tratados internacionales, que sin embargo no pueden ser considerados así porque en el codigo penal italiano el crimen de tortura simplemente no existe. Entonces para los torturadores en uniforme el fallo fue mucho más blando: penas entre los 6 meses y un poco más que cinco años de carcel, contra los 110 totales pedidos en el caso de los compañeros condenados. Por este juicio, además, está acusado también el ex-jefe de la policia Gianni De Gennaro, ahora super-comisario por la “emergencia basura” en Napoles, y que también acaba de ser acusado por haber fomentado a un inferior suyo a decir falso testimonio sobre los hechos de la noche de la matanza en el colegio Diaz. Ya pasaron 7 años desde la cumbre del g8 y exactamente ahora, con estos fallos vergonzosos, el Estado pone en marcha su mecanismo represivo, mientras la prensa y la izquierda moderada siguiendo subrayando que harían buenos y malos, con consecuencia de legitimar a las fuerzas del orden y de excluir y de solidarizar con los compañeros que tienen practicas más radicales en la calle.